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¿Es realmente seguro recurrir a los domicilios en esta época? ¿Qué dicen los expertos y cuáles son sus recomendaciones de seguridad?
Luego de que el 11 de marzo la OMS declarará el Coronavirus como una Pandemia, nuestro mundo se ha visto revolucionado en pequeños y grandes aspectos, proponiendo innumerables retos personales, sociales y comerciales. Desde el desconocido distanciamiento social, la cuarentena obligatoria, las nuevas prácticas de higiene respiratoria, el uso de tapabocas y la constante desinfección de manos, pasando por el teletrabajo hasta el cierre de fronteras y cancelación de vuelos comerciales en toda Colombia.
Haciéndole seguimiento al Coronavirus, La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Autoridad Europea para la Seguridad de los Alimentos (EFSA por sus siglas en inglés) declararon que, no hay pruebas ni estudios científicos que comprueben la transmisión del virus a través de los alimentos y que el riesgo de contagiarse a través de un paquete es muy bajo, de esta manera la industria alimentaria y el sistema de domicilios han creado diferentes alianzas y la implementación de diferentes medios, perfectos para la comodidad y el cuidado de las personas, brindando apoyo y fácil acceso a los bienes de primera necesidad. Ambos sectores, se han visto forzados a evolucionar a medida que el COVID-19 avanza y se vieron en la obligación de asumir nuevos protocolos de limpieza, desinfección y elementos de bioseguridad para la protección de productos, empleados y clientes.
El brote de Coronavirus ha impulsado la solicitud de pedidos a través de las aplicaciones, un ejemplo es la StartUp colombiana Rappi, que dijo en un comunicado que ha tenido un aumento del 30% en las entregas en los primeros dos meses de 2020 en comparación con años anteriores; lo cual confirma la importancia de protocolos en medio de esta emergencia global. Algunos de ellos, empleados por líderes de estos sectores, han sido los centros de prevención, jornadas de desinfección y limpieza para los vehículos, elementos de cuidado personal para la entrega de los productos, el uso de doble bolsa y empaques de seguridad; así como, la implementación del delivery sin contacto y el pago con tarjeta directamente en la aplicación, esto para evitar o minimizar el contacto humano, que es la modalidad de contagio que tiene el virus.
De la mano a la implementación en los empaques para mantener la seguridad en los domicilios, encontramos que los restaurantes están haciendo uso de cintas de seguridad y etiquetas de seguridad para proteger el contenido de los paquetes de la manipulación de otros y así reducir los riesgos de contaminación al mínimo posible.
El uso de estos sellos de seguridad, como también se les conoce, es muy sencillo y cuenta con una serie de características como la adherencia inmediata en diferentes materiales, temperatura de servicio de -20 º C a 70 º C y un adhesivo aprobado por parte de la FDA (Food and Drug Administration por sus siglas en inglés) para el contacto indirecto con alimentos (1907/2006 REACH), que benefician tanto a proveedores como consumidores.
De esta manera, una vez los restaurantes realizan la preparación del pedido de forma segura y empacan aplicando la cinta de seguridad, garantizan que el contenido del producto fue cerrado en un lugar seguro y limpio. Mientras que, el consumidor final va a poder verificar el estado de su pedido gracias a la evidencia la apertura de sus empaques mediante el revelado de un texto de seguridad permanente al momento de retirar la cinta de la superficie, indicando que el paquete ha sido abierto. Así se puede cuidar al cliente y preservar el propósito de cada marca.
Publicado el 23 de abril de 2020
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